Gracias a la tecnología y a lo rápido que esta evoluciona, vivimos actualmente en un mundo muy cambiante para cualquier industria. Esta es una realidad a la que ya deben adaptarse los profesionales de hoy, y que se sentirá incluso más para cuando nuestros niños sean adultos e ingresen al mundo laboral. En ese contexto, será clave desarrollar en ellos el valor de la resiliencia.
¿Qué es la resiliencia en los niños?
La resiliencia se da cuando una persona tiene una capacidad muy amplia de afrontar adversidades, cambios en su entorno y distintas clases de contratiempos que puedan afectarla. Cuando hablamos de resiliencia en los niños, nos referimos a que estos sean capaces de adaptarse saludablemente a giros que se presenten en su vida escolar, familiar o social.
Podemos reforzar este concepto con lo indicado en un estudio de la Columbia University de los Estados Unidos, que define a la resiliencia en edad temprana como una adaptación relativamente positiva, pese a experiencias de riesgo o situaciones traumáticas.
¿Por qué es importante fomentar la resiliencia en los niños?
Porque la vida puede tener altas y bajas en distintos ámbitos y presentar cambios inesperados. En ese sentido, es crucial que los niños cuenten con la actitud y las herramientas necesarias para poder sobrellevar estas situaciones de manera saludable, paciente y con predisposición para abordar nuevos desafíos o problemas. Esta capacidad no solo les servirá para el colegio y la vida en casa, sino que los formará también para poder ser adultos que sepan adaptarse a las dificultades que vayan surgiendo.
Actividades para desarrollar el valor de la resiliencia en los niños
A continuación, te presentamos algunas actividades que te permitirán desarrollar la resiliencia en los niños. Puedes motivar a tu hij@ a practicar alguna de ellas o, aún mejor, más de una.
Actividad del espejo
Se trata de un juego que nos permite reflexionar sobre nosotros mismos, sobre nuestras emociones y sobre nuestro amor propio. Consiste en pararnos frente al espejo, realizar gestos y movimientos y ser conscientes de las emociones que vamos expresando. En el caso de los niños, esta actividad puede sumar mucho a su autoconocimiento.
Mindfulness
Aunque no lo creas, los niños también pueden practicar el mindfulness. Esta famosa actividad para combatir el estrés y la ansiedad consiste en focalizar nuestra plena atención en el momento presente, centrándonos en lo que sentimos y percibimos al realizarla, sin pensar en problemas del pasado o preocupaciones por el futuro. ¡Recuerda que no es lo mismo que la meditación! Aunque se les suele ver como cosas iguales, el mindfulness no tiene nada que ver con la espiritualidad, sino con una técnica de relajación respaldada por la ciencia.
Resolver problemas con herramientas
El uso de herramientas para reparar cosas nos permite usar la creatividad ante problemas que encontremos en objetos y mecanismos. En el proceso de reparación podemos ir encontrándonos con dificultades que no esperábamos, pero que podemos superar para lograr el objetivo a partir de nuestra creatividad y de las herramientas que tenemos a la mano.
Actividades al aire libre
Las actividades familiares al aire libre como el senderismo y el camping pueden ser otra buena alternativa, ya que, para un niño, el campo y los espacios abiertos naturales pueden presentarles escenarios impredecibles que desarrollan su ingenio y creatividad mientras juegan.
Cursos de programación online
A nivel digital, la programación para niños es una manera perfecta de estimular la resiliencia de nuestros hijos, ya que crear programas, aplicaciones o juegos presenta una serie de retos que los pequeños pueden resolver a través del código. Además, el entorno siempre cambiante de la tecnología, por sí mismo, puede no solo volver resilientes a los niños, sino también darles habilidades que sume mucho a su futuro profesional.
Consejos para desarrollar la resiliencia en los niños
Tras conocer algunas actividades que pueden servir como ayuda, te brindamos también algunos consejos para reforzar como padres la resiliencia de nuestros hijos.
Enseñarles a entablar relaciones
Los seres humanos somos capaces de más cosas cuando trabajamos en equipo y nos rodeamos de gente positiva. Son nuestros colegas de trabajo, compañeros de clase, amigos y familiares quienes nos pueden ayudar a encontrar salidas a problemas que son bastante más difíciles de encarar en solitario.
Motivarlos a ayudar a otros
En línea con el consejo anterior, el valor de la solidaridad puede fortalecer mucho nuestra resiliencia ante situaciones adversas. Por ello, nuestros hijos deben aprender que en el mundo recibimos lo que damos. Así, si en determinado momento ayudamos a alguien que no encontraba la solución a un problema que lo aquejaba, lo mismo podrá hacer esa persona por nosotros cuando la situación sea inversa.
Mantener una rutina diaria
El día a día presenta nuevos retos, variantes y desafíos a superar. Sin embargo, la disciplina y el mantener una rutina puede ayudar a tu hij@ a no perder el foco y mantenerse concentrado en sus objetivos pese a los cambios del entorno.
Enseñarles a descansar
Tomar un respiro siempre es una buena idea cuando nos cuesta encontrar soluciones. Debemos ayudar a entender a nuestros hij@s que, si hoy no se nos llega a ocurrir qué hacer para salir de un problema, tal vez mañana, con la cabeza más despejada, podemos pensar mejor las cosas y tener mayor claridad en nuestras decisiones.
Enseñarles a cuidarse
La salud es lo más importante y el principal punto de partida para encarar mejor las dificultades de la vida. Es bueno no rendirse y persistir para vencer una dificultad, pero nuestros hij@s deben comprender que no vale la pena comprometer su salud física y emocional, o hacer sacrificios desproporcionados. Será importante que les enseñemos a poner límites.
Enseñarles a fijar metas e ir tras ellas
Una vida plena y feliz es aquella en la que siempre tenemos objetivos y podemos disfrutar tanto del proceso de alcanzarlos como de la meta lograda. Esa fijación en lo que queremos ayudará a nuestros pequeñ@s, tanto ahora como en el futuro, a resistir mejor las adversidades y los obstáculos que se presenten.
Promover una autoestima positiva
El amor propio y el convencimiento en nosotros mismos es el principal punto de partida para lograr nuestros objetivos. Si tu hij@ no confía en sí mismo, ¿cómo se sentirá capaz de lograr lo que se propone? Por ello, será crucial educarlos en un ambiente lleno de amor, de reconocimiento y de refuerzos positivos ante los pequeños logros del día a día.
La actitud positiva es importante
No podemos aspirar a cosas bonitas o mejores si sentimos que casi todo en la vida está mal. En ese sentido, es importante convencer a nuestros niñ@s de que, pese a las dificultades y a las situaciones tristes que puedan presentarse, hay que hacer un esfuerzo por mantener una actitud positiva dentro de lo posible. Este consejo, por supuesto, tiene sus matices, ya que puede haber situaciones que nos superen y para las que necesitaremos ayuda especializada.
Promover el autodescubrimiento
Nuestras maneras de superar las adversidades se multiplican cuando somos conscientes de todas nuestras capacidades. Por ello, es importante motivar a nuestros hij@s a profundizar en sus talentos y a desarrollar nuevas habilidades con el correr del tiempo. De esta manera, contarán con más herramientas y con una confianza más fortalecida para encarar los desafíos.
Enseñarles que los cambios forman parte de la vida
Pese a que todos los consejos anteriores van sobre cómo hacer frente a los cambios, otra lección importantísima para la resiliencia de nuestros hij@s es que los cambios forman parte de la vida misma. Nunca podremos tenerlo todo bajo nuestro control ni predecir los obstáculos que se presentarán, por lo que no resultará saludable frustrarnos cada vez que se den. La paciencia y la aceptación de esa realidad ayudará a tu pequeñ@ a asimilar mejor los problemas.
Ya sabes por qué la resiliencia resulta tan importante en el desarrollo de tu hij@, así como qué actividades y enseñanzas pueden jugar a tu favor para criarlo bajo una manera positiva de encarar la vida. Recuerda que, si quieres educar a tu coder en la resiliencia a nivel digital mientras desarrolla habilidades para el futuro, puedes inscribirl@ en los cursos de nuestra academia de programación para niños.
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